domingo, 13 de mayo de 2007

¡¡¡Se acabo!!! (o casi). Pero no se vayan todavía, que aún hay mas.

Bueno, ya está... mañana 14 tomo un avión a Roma y el 15 llego a casa.

En unos dias trataré de poner fotos en su sitio para que quede todo un poco mas visible asi que...

Permanezcan atentos a sus pantallas y gracias a todos por su interés y atención.

Besos.

jueves, 10 de mayo de 2007

Más fotos (de Bujara)











He llegado a Bujara sin problemas en dos días desde Samarcanda, haciendo parada intermedia en Navoi, una ciudad sin ningún interés y por eso mismo muy interesante. Deslumbrante Bujara, en mitad del desierto.






miércoles, 9 de mayo de 2007

¡¡¡Fooootooosss!!!















De Samarcanda.

lunes, 7 de mayo de 2007

Timur, Timur-Bek (o Beg), Timur-lenk, Tamerlán







Este señor, destructor y constructor de ciudades y conquistador de medio mundo en poco más de diez años, y sus descendientes directos, son los responsables de la mayor parte de los magníficos monumentos de estas ciudades.



Un culto y religioso asesino en masa. Aquí esta su tumba, que he visitado esta mañana.
En el moderno Uzbekistán, su figura, limpia de toda mancha de sangre y magnificada hasta extremos míticos, ha sido convertida en una especie de padre-semidios fundador de la nación uzbeka, lo que, como mínimo, es extremadamente discutible. Estatuas de Timur llenan los parques sustituyendo al panteón soviético en muchas ocasiones, libros sobre su figura se encuentran en las escuálidas librerías, algunos billetes llevan también su imagen. Es curioso ver en vivo como, de casi la nada, se construye una identidad nacional que será la indiscutible verdad para las siguientes generaciones.


Un personaje Timur, al que, en su encantador libro (si es que en verdad lo escribió él) "Embajada a Tamorlan", Ruy Gonzalez de Clavijo, llama con el bonito nombre de "el Tamurbeque", allá por 1405. (Ed. Castalia, muy entretenido).

Por cierto, que como decía también el bueno de Clavijo, no me vendría mal muchas veces un buen trujuman (¡a los diccionarios!), para poder comunicarme mejor... aunque aqui en el B&B la lengua sea el inglés (¡¡¡y el francés!!! parece que Uzbekistán esta de moda en Francia)...pero mi ruso sigue sin mejorar como desearía...

Y de mi uzbeko y mi tadjiko -que los dos se hablan por aquí- mejor no hablar.
(Fotos en la tumba de Tamerlán)

Sin comentarios (con comentarios)

Aqui debería ir una serie de deslumbrantes fotografías de la ciudad, peeeeero la tecnología no desea colaborar...



Lo solucionaremos cuando encuentre un ciber adecuado o, en su defecto, desde casa cuando vuelva.

domingo, 6 de mayo de 2007

¡¡¡¡¡Samarcanda!!!!! (al fin)













5/5 Me levanto al amanecer. Junto a los "lavabos" a las cinco de la mañana se desenvuelve un hervidero de gente en lo que parece el inicio de un mercado de ganado. Es curioso ver a las ovejas bajando del asiento trasero de un "Lada", de esa version rusa del Seat 124 o 1430, o a las terneras, algo mareadas en lo alto de furgonetas inverosímiles.


Después de un duro pedaleo de otros 170 km. bajo un sol imponente llego por fin a la que en cierto modo era la meta del viaje: Samarcanda. De momento no decepciona, me voy a estar aqui tres dias, ya habra tiempo de hablar de ella con calma. El dia 8 salgo en direccion a Bujara.

(Fotos de monumentos de la ciudad, unas niñas en el Registán, la plaza central, que se quisieron fotografiar con mi bici, y la última es de cuando he llegado a la provincia -"vilayat"- de Samarcanda).

Tashkent-Dasthabad "Ne gashtinitsa tam...!!!"





Día 4/5, 181 km. en bici.

Como suele pasar, los letreros de la carretera y los mapas mienten. Los datos que tengo indican que Samarcanda esta a unos 290-300 km de Tashkent. En realidad, me esperan 350 km de baches y viento.

El primer día trato de acortar al máximo y decido parar en Dasthabad, un pueblo que, sobre el mapa parece suficientemente grande para encontrar alojamiento. Llego muy cansado de pelear contra el viento (y algo de lluvia los ultimos 40 km.). A mi izquierda, a pocos kilómetros, está la frontera de Tadjikistán, que no cruzaré, un poco más al este ha quedado también Kirguistán, China a algo mas de 500 km. en línea recta.

Pregunto en el pueblo y, para mi sorpresa todo el mundo coincide en que el hotel mas cercano está en otro pueblo mayor llamado Yizzakh, ¡a 50 km.de distancia!
Ante mi insitencia me dan, sin embargo una solución. Allí, junto a la carretera, uno de ellos tiene una "chaykhana" (literalmente una casa de té, pequeños restaurantes de carretera) y me ofrece dormir en un pequeño cuarto por cuatro perras. Muy agradecido, aunque el cuarto son cuatro paredes y una alfombra raída en el suelo. Por fortuna llevo mi material de acampada y no necesito más.

Me lavo como puedo con un cubo (no hay agua corriente) y los labavos son un edificio comunal que usa medio pueblo a unos 200 metros de la chaykhana (una hilera de agujeros en el suelo sin puertas)...Pero con todo me solucionan el problema y estoy contento con el sitio, ¡¡¡ya habrá tiempo para duchas mañana!!!

En compensacion, la cena que me sirven esta sorprendentemente buena vista la escasez del sitio, y muy abundante.

Duermo profundamente desde el ocaso hasta poco antes del amanecer.

sábado, 5 de mayo de 2007

Reciclaje


Ya lo he visto un poco por todas partes, quizás desde que salí de Zagreb, pero la cosa se acentúa conforme uno va más al este.

Los autobuses urbanos e interurbanos, e incluso en muchos casos los tranvías, que se ven por las ciudades muchas veces resultan ser viejos aparatos (de 30 o 40 años a veces) procedentes de Francia, Alemania, Suiza...Hasta aquí todo normal, así funciona el mercado...lo curioso es que casi siempre mantienen los letreros originales y así, he podido ver en Tashkent, por ejemplo, un autobus de la empresa "L. García" que probablemente me supere en edad, y otro de una empresa de Pontevedra (no recuerdo el nombre) que quizás llevara a mis padres en su viaje de novios por Galicia allá por los sesenta.

De otros reciclajes mas domésticos no hay mucha noticia.

Symkent-Tashkent







No, no es un trabalenguas.

El 1/5 cambio de ciudad y de país, cruzo la ajetradada frontera entre Kazajstán y Uzbekistán, sin más problemas que el normal retraso de formularios y burocracia (no tienen formularios en inglés, por ejemplo, y me tengo que pelear con un indescrifrable papel en ruso. Pocos kilómetros mas alla llego a la enorme Tashkent, una ciudad de unos 2,5 millones de habitantes pero que en extensión (como sucede con todas las ciudades que fueron soviéticas) presumo que es como cuatro Barcelonas al menos: enormes y amplísimas avenidas, una inesperada superabundancia de zonas verdes (jamás había visto tantos y tan grandes parques), mucha gente también después del escasamente poblado Kazajstán suponen un buen contraste. 130 km. de bici en el día.


Hay de todo salvo librerías que merezcan ni de lejos ese nombre. Me estoy aquí tres días, también para, en un nuevo cambio de planes (presupuesto obliga) comprar mi billete de avión, finalmente no a Estambul sino directamente a Roma. El dia 14 a primerísima hora de la mañana tomo el avión y, tras 7 horas de vuelo y por mor del desfase horario, llego el 14 a las 8:30 de la mañana a Fiumicino. De allí 60 km. a Civitavecchia, ferry, y un día después en casa.